En el budismo, el ego es planteado como un "objeto" emocional que limita el ser y para la sociedad actual la autoestima es parte del crecimiento colectivo. Autoestima sana fomentada por valores compartidos pero... ¿Cual es la real diferencia entre estos dos términos? ¿Hay un punto medio?

 Entonces, ¿es el ego la deformación de la autoestima? ¿Es el ego la representación de lo que queremos instintivamente? y porque la percepción de la estima se basa solamente en lo que vemos o consideramos y no de otras cosas. Quizá es darle vueltas al mismo asunto, las personas tienen mundos interiores muy grandes pero sé que según estudios de psicología emocional desarrollados por estudiantes en Alemania durante la post-guerra, la estima puede ser buena y puede ser mala. En si, el termino Autoestima es "neutral", un indicador que puede estar bajo o alto... ¿el ego es igual acaso?
Cuando empece a estudiar esta carrera (Diseño gráfico) pensé que las personas no tenían interés en lo estético por encima de lo practico y me sorprendí encontrándome con lo opuesto, aun hoy en clases me sorprende lo "perceptivo" que puede ser todo y muy por encima de lo "usable". Según David E. Salas, psicólogo entusiasta de la psicología positiva, relaciona el ego como parte fundamental de la estima personal de un individuo mencionando que el ego es la importancia que le damos a nuestro yo en el mundo y la estima es lo que sentimos respecto a nosotros mismos, básicamente a "puerta cerrada".
Aquí esta lo interesante de esta aparente dualidad en estos "indicadores" y es que una persona con mucho ego puede tener baja autoestima que vendría a ser el caso promedio pero lo opuesto es poco frecuente. La teoría que surge respecto a esto en mi cabeza es: ¿Es el ego un elemento de rebote para amortiguar el daño colateral en la interacción con otros? Quizá no nos damos cuenta de cuantos mecanismos de defensa podemos tener, cuantos muros hay entre los estereotipos, las expectativas, nuestras propias metas e incluso las ansiedades que causan el mundo competitivo donde una persona simplemente trata de existir.
Siempre he tratado de aferrarme a la idea de aceptación muy por encima de percepción. Esto es algo que me ayuda a entender estas preguntas. Y digo aferrar porque no descarto la duda del concepto en si, sé que soy una persona pequeña aún y trato de no afirmar hasta no comprobar. No me libro del ego, como todos, como muchos pero creo que es difícil lidiar con la inestabilidad de la estima cuando el ojo se desenfoca de los intereses personales... Dar a veces puede ser peligroso pero recibir siempre va a sumar en algún lado ¿no? Siento que aceptarse es parte de eso, de entender que podemos desprendernos de mucho y no recibir nada más porque ya nos tenemos a nosotros mismos.
Poner en práctica la autoaceptación no es tarea de un día, vaya que lo he visto y he comprobado que hay que estar del lado de sí mismo; contar con la voluntad de experimentar más que de rechazar los hechos del momento; y poseer la idea de compasión, de ser amigo de nuestro "yo". Vuelvo a las primeras preguntas que mencione al escribir esto: La estima no necesariamente debería estar basada en la percepción, vemos pero no asociamos a una razón o a una intención, cuando tenemos razones y la motivación en la ecuación ya vemos que la integral es menos de Egos y más de entendimiento.
Para todo esto hay un concepto que debido a su parcialidad no es una verdad absoluta y es que el ego nos hace dependientes de otros y la autoaceptación nos hace introspectivos para mantener una estima equilibrada. Cuando alguien nos da un "cono de helado" (un halago efusivo sin razones, un reconocimiento fútil) es agradable por el instante pero a mediano plazo solo nos deja sedientos, es dulce y agradable pero no nos hidrata realmente.
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A la fecha de hoy, veo este texto en retrospectiva y siento que la intención no ha cambiado tanto. No he logrado lidiar bien con ese "Yo" que viene en el ego aún. El camino sigue allí y voy aprendiendo con el sobre mi y sobre la relación conmigo misma.

                         Posiblemente no exista palabra que sea mirada en forma más peyorativa en las enseñanzas religiosas y en la literatura espiritual que la palabra “ego”. […] El ego quiere sentirse superior y especial, tiene que tener razón todo el tiempo y, peor aún, obstaculiza continuamente cualquier desarrollo espiritual porque oscurece la conciencia como un velo. (M. Shama, The Economic Times. Nueva Delhi: 15 de enero de 2011)

Gracias por leer, dejen sus comentarios: cuéntenme un poco sobre su idea de ego, autoestma y como manejarlo.